Los registros tardíos inundan los High Rollers de las WSOP

Las WSOP están en plena temporada de High Rollers.

Después del NLHE HU Championship de 25.000 $ y el torneo mixto de NLHE/PLO, también de 25k $, dos torneos que no despertaron demasiado entusiasmo, el programa ya ha ofrecido un 6-Max HR 25k $ y un 8-Max HR 25k, que, estos sí, han elevado la expectación por las nubes.

Estos dos últimos eventos, además de premios por encima del 1.5M $ para el primero, han ofrecido unas imágenes bastante curiosas al inicio del día 2.

Nos referimos al registro tardío incluido por la organización, y que abarca hasta la conclusión del nivel 9, el primero que se juega durante el día 2 de cada torneo.

¿Recuerdas el conflicto provocado por el uso del registro a través de la aplicación móvil WSOP +? Los jugadores ya no están obligados a tomar asiento inmediatamente, y esto le otorga un valor añadido a cualquiera que compre un shortstack, ya que, si elige bien el momento de incorporarse a la partida, dispondrá de varias manos gratis antes de tener que poner su primera ciega.

Las consecuencias han sido avalanchas de registros tardíos en los High Rollers, a cargo de nuevos jugadores y de anteriores eliminados que se guardaron la recompra permitida para el último suspiro del registro tardío. Cerca de un cuarto de cada field se incorporó al torneo en el día 2.

El torneo de mesa corta tuvo menos jugadores y la dirección pudo recolocar sin aparentes problemas a los recién incorporados, pero en el 8-Max se desató el caos.

Había casi tantos jugadores intentando sentarse en el torneo como los que estaban jugando, y a su vez, el formato mantenía menos mesas abiertas, con lo que las sillas disponibles no eran suficientes. El registro pasó de 300 a 392 jugadores en el periodo de gracia, y la práctica totalidad de ellos formalizó su incorporación a última hora.

La dirección de torneos se vio tan desbordada que hubo de ser tajante. Se suspendió el torneo para realizar un redraw no estipulado en la estructura. El plan que traían preparado algunos jugadores para jugar varias manos gratis no se pudo llevar a cabo.

En el apartado de resultados, los jugadores latinos no han podido brillar en estos torneos.

El de mesa corta acabó con victoria de Blaz Zerjav y no hubo ni un solo hispanohablante en premios.

En el 8-Max quedan 18 jugadores, ninguno de ellos nacido en nuestro ámbito de influencia, y los únicos en cobrar fueron Javier Gómez, 35º (53.178 $), y Christian Roberts, eliminado en cuanto estalló la burbuja, el 55º de 59 jugadores en premios (50.645 $).