La pantalla traicionera de Nacho Barbero no traerá consecuencias inmediatas

Las principales salas del mercado gris que sirve a los jugadores de Estados Unidos se han puesto de acuerdo para saltar a la palestra de la polémica durante esta semana.

A las denuncias sobre grupos de jugadores haciendo colusión en los torneos más caros de la red Ignition, se le une ahora el desliz del embajador de ACR, Nacho Barbero, que subió una imagen a Instagram para promocionar el torneo insignia de la casa, el Venom, y se le coló una ventana del GTO Wizard en el encuadre.

La sorpresa general que mostró la comunidad, en primera instancia, viró enseguida hacia la indignación tras la pobre excusa de Nacho, que admitió que usaba el programa, pero solo para dar consejo a cuatro de sus caballitos en la sala.

La ira fue en aumento tras la decisión de ACR de lanzar un grotesco comunicado exculpando de inmediato a Barbero, quitando hierro al asunto y anunciando que no iban a tomar medidas disciplinarias contra él. «Nacho es un payasete y cualquiera que le haya visto jugar o haya jugado contra él sabe que no juega GTO«, era la frase que encabezaba el comunicado. Fue como usar gasolina para apagar un incendio.

Con el objeto de controlar los daños, los responsables de ACR tiraron de humildad, reconocieron el error de quitarle importancia a lo sucedido, y anunciaron que iban a llevar a cabo una investigación interna sobre el suceso. Además, aceptaron compartir los datos en su poder para posibilitar una investigación externa llevada a cabo por Patrick Leonard, que ha asesorado a varias salas sobre seguridad.

Reconocemos que nuestra respuesta inicial a la preocupación causada por las acciones de Nacho Barbero fue de mal gusto y no casaba con la seriedad con la que nos tomamos el asunto…

Ahora sí, con mejor redacción, de forma más seria, y aportando alguna prueba -aunque provenga de una parte interesada-, ACR redundó en la inocencia de Barbero, y en su decisión de dejar pasar el tema sin represalias.

Algo más de peso tiene la decisión de Leonard, que actúa como testigo imparcial, aunque se ha declarado amigo de Nacho y se rumorea que tiene algún vínculo con ACR. Ha verificado que el uso del programa es discontinuo, y apenas coincide con las horas de sesión. Su veredicto coincide con el de ACR. Nacho Barbero es inocente.

Sin embargo, y aquí Patrick habla por mucha de la gente que ha participado en las discusiones sobre el suceso, Barbero nunca debió tener abierto el GTO Wizard y el cliente de la sala a la vez.

No tomo parte ni por Nacho ni por ACR. Creo que su negligencia debió tener repercusiones, pero yo aquí ni soy juez ni jurado. Vivo en Las Vegas, con opciones limitadas para jugar online, trabajo para un competidor, CoinPoker, y no tengo interés personal en hacer que Nacho parezca inocente.

Para zanjar definitivamente cualquier tipo de polémica, Nacho ha decidido renunciar a los dos stacks que le quedaban en los torneos disputados durante aquella desgraciada sesión.